CHRIS VAN ALLSBURG
Monsieur Bibot, el dentista, recibe con enfado dos higos como pago de una mujer pobre que le dice que esas frutas pueden hacer sus suenos realidad. Esa noche, antes de dormir, Bibot se come uno de los higos, que resulta delicioso. A la manana siguiente, saca a pasear a Marcel, su perro, que no vive muy a gusto en la impecable y ordenada casa de Bibot. Misteriosamente, descubre que el higo hizo realidad su sueno, y se propone guardar el segundo, sin saber lo que le depara el destino. Una superba historia, con multiples lecturas y una delicada ironia que versa sobre el verdadero valor de los suenos y los deseos.